Décima espinela

No hay mejor composición,
que la décima espinela,
me cautiva, me desvela,
es dulce como acitrón.
Las reglas de acentuación
siempre las llevo en la mente
y también tengo presente
hiato, sinalefa y rima
y mi estrofa se sublima…
octosilábicamente.

—-

Las ventanas de mi pueblo

en ventanas dibujadas
olas que vienen y van
intercaladas están
bellas figuras forjadas
letras s acostadas
que te invitan a observar
entre pilar y pilar
muebles tallados lujosos
que lucen esplendorosos
limpieza y calor de hogar.

—-

Nuestro río papaloapan
desmorono la rivera
con el enorme caudal
que llevo como un raudal
con lirio, flor y palmera,
soy deslumbrante quimera
arrebor crepusculares
ayúdame a reflejar,
matiza mi gran espejo
con bello color bermejo…
antes de que llegue al mar.

—-

La presa de Temazcal
igual que el acerro de oro
llegan al máximo aforo
por la lluvia torrencial
cae un copioso caudal
de agua limpia y cristalina
el relámpago ilumina
las nubes que dan a luz
en mi bello Veracruz
por ordenanza divina.

—-

Mi Virgen de Candelaria
patrona de la ciudad
con devoción y humildad,
labios musitan plegarias
eres como luminaria
todo que el que te circunda
con tu mirada profunda
candelaria milagrosa
tú luces esplendorosa
haces la tierra fecunda.

Haces la tierra fecunda
hermosos cañaverales
bastedad de pastizales
la pesca también abunda
con la fe que nos inunda
te paseamos por tu río
bendices el caserío
lluvia de globos y flores
en sinfonía de colores
contrasta con tú atavío

Contrasta con tu atavío
en olas una tras una
el agua verde aceituna
son las caricias del río
los feligreses con brío
prosiguen tu adoración
el sentimiento expresión
de fe con escapulario
tu nombre lleva el santuario
te entregan el corazón.

autor: Diego de Jesús Cruz Lara

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